Vivencias que dejan huellas

Cada día se forja una historia en nuestras vidas con diferentes situaciones que nos van sucediendo, sin embargo sólo algunas van dejando huellas en nuestra memoria.

Adiós


Mucho fue el tiempo, que aunque no estabas presente te espere
Soñé una y otra vez con estar junto a ti y tenerte junto a mí, sin embargo cada una de esas ilusiones se fueron diluyendo con tu inexistencia. Sólo en oportunidades aparecías y luego en silencio te marchabas. Y aún así proseguí con mi espera, porque viví con la esperanza de continuar esta historia que por instancias fue interrumpida, y me aferre fuertemente a ti, porque fuiste mi regalo, el regalo que Dios me había hecho y no quería soltarlo, te apreté contra mi corazón y ahí estabas, sin querer salir de ahí. Fueron tiempos complejos, pero ahí seguías, aumentando mi quimera. Pero hoy, con la luna como compañía y tus palabras en las mías, me despido de esto, de todo lo que por mucho tiempo sentí, de todo lo que entregue, de todo lo que viví, me despido y dejo aquí todo el amor que me hiciste sentir, y aquí, junto a la luna te suelto, y abro mi mano para que puedas salir. Hoy comienzo una nueva vida sin tu presencia, aunque sea en mis sueños, porque tal vez ya sea necesario dar vuelta la página, porque simplemente no existo en tus planes y yo, tengo que comenzar nuevos planes, en donde no estarás tú. Hoy es el fin de nuestra historia, y el comienzo de otra. Hoy me despido del amor que provocaste en mí. Adiós