Vivencias que dejan huellas

Cada día se forja una historia en nuestras vidas con diferentes situaciones que nos van sucediendo, sin embargo sólo algunas van dejando huellas en nuestra memoria.

Nuevo Amanecer

Despierto, y ante mis ojos un nuevo amanecer, con rayos que van penetrando mas allá de lo que mi vista pueda percibir, lleno de colores que no soy capaz de describir, porque sus mezclas han cautivado mi existir.
No puedo dejar de mirar lo que hoy puedo vivir, porque simplemente es demasiado para mí, sin embargo me halagan con su hermosura, transportándome a un sueño repleto de realidad.
Camino a paso lento, porque no quiero perder de vista todo lo que se presenta frente a mi vista, y aunque a ratos mis ojos se cierran, puedo sentir la brisa que acaricia con dulzura, con ternura, aquella que susurra con cuidado, haciéndome sonreír.
Soy feliz ante tanta majestuosidad, ante tal creación que se presentó sin previo aviso, sólo llegó. Y con ímpetu me dejo caer entre algodones de seda, tersos y blandos, amortiguando mi deslizar.
Y así permanezco, dejando que todo suceda, en calma, sintiendo lo que voy viviendo y esperando sin miedo lo que viene, aquello que aunque no se bien lo que será, confiada estoy porque conmigo estás.
Y continúo, con el latir de un corazón que no se ha de bloquear, porque en calma o tempestad puede estar, percibiendo cada situación que voy viviendo, palpitando con mayor intensidad porque dejo su escondite para sentir libertad.