Vivencias que dejan huellas

Cada día se forja una historia en nuestras vidas con diferentes situaciones que nos van sucediendo, sin embargo sólo algunas van dejando huellas en nuestra memoria.

Recuerdos


Recuerdos recargados con insidiosas situaciones son las que vuelven y entorpecen el caminar de quien se vuelve a encontrar con ellos. Paralizando por segundos el momento, y silenciando por completo una comunicación hablada que se traslada de inmediato a una comunicación gesticulada, llena de movimientos que dan a entender de manera implícita lo que hay.

Y así estamos, envueltos en una praxis que a nada nos lleva, pues intentamos ignorar lo que ocurrió. Pero ahora, cuando no existe compañía, sólo el sonido de mi fiel respiración, vuelvo a visualizar lo que pasó y comprendo que es un recuerdo, solo eso, y nada va a provocar con su aparición.

Volverte a Mirar


Tratar de borrarte, aunque sea por segundos de mi mente se torna imposible de lograr, porque estas presente en cada uno de mis pensamientos y te puedo observar aún cuando ausente estás. Necesitando con vehemencia de ti, de todo lo que me gusta y anhelo, de todo lo que hoy me hace feliz.Te miro día y noche, porque simplemente no puedo quitar mis ojos de ti, y en silencio y a gritos te amo, tratando que a cada instante, en esta historia que juntos decidimos construir, lo puedas sentir.Eres mi sueño y realidad, el silencio que calma mi tempestad, el torrente que moviliza mi aburrida estadía en algún lugar, el esbozo de una sonrisa, mi risa, alegría a la que por ningún motivo voy a renunciar.Déjame llenarte de todo lo que soy, de todo lo que hay, de todo lo que junto a ti puedo lograr, y sin temor avanzar. Enséñame a confiar sin miedo, porque entiendo que no todo es igual. Dame de tu aroma, cúbreme con tu fulgor, vuelve día a día a fijar tu mirada en la mía y en silencio observar que sólo somos tu y yo.Lléname de ti y no permitas que lo que sucede deje de ocurrir, quiero permanecer por siempre en esto, que aunque el reloj ah transitado en un tiempo corto, mil emociones ha provocado dentro de mí. Y Hoy, en un nuevo amanecer puedo plasmar sin dudar lo que va creciendo, porque son tus ojos mi inspiración para volver a redactar.

Junto a Ti





Sin buscarlo, sin desearlo te encontré, junto a mi, todo el tiempo,
en silencio caminabas a mi lado, en silencio caminamos con cuidado,
y de a poco nuestros mundos se entrelazaron y sin querer aceptarlo,
te ibas haciendo parte de mi.
Nos perdimos de vista por unos instantes, sin embargo te necesité,
como nunca te busqué, pero no estabas,
había perdido tu mirada y me fui negando a esto,
a este sentimiento que por momentos me atormentaba y me estancaba.
Llena de temores trate de bloquearlo, pero era mas fuerte que yo,
no pude y entendí que definitivamente eras parte de mi,
entendí que no quería estar si no fuera junto a ti,
comprendí que mi mundo se completaba a tu lado,
que mi vida se llenaba de colores cuando me hablabas
o simplemente cuando nuestras sonrisas se hallaban,
comprendí que eras mucho más de lo que yo pedí

Caos


Ya la noche cubrió el cielo y aún no puedo dormir, este caos se apodera de mis pensamientos de los cuales trato de huir por miedo a lo que pueda venir. Me asusta este silencio de imágenes vagas que se presentan una tras otra, dando a conocer con cierta sutileza las acciones vividas en cada una de ellas. Cierro mis ojos para que, aunque sea en minutos y segundos olvidar lo que hoy no me deja avanzar, sin embargo es ahí cuando más presente se hace en mí, controlando este angustiante estar. Pero al volver al presente, a lo que es, a lo que soy, mis miedos se intensifican. Que hay de todo esto?, nada!! No existe nada y yo envuelta en un caos, inmersa en la furia de palabras que se lanzan al vacío sin poder encontrar el punto fijo en el cual descansar.
Día a día me transformo en esto, tratando de ocultar el enredo que ataca mi existir, manteniéndome junto a cada uno de mis sueños, los que se acercan sin decoro, pero no se, tal vez sea parte de una falacia construida por la ilusión de alcanzar aquello que en algún momento perdí, aquello que quedo en el olvido y que en su momento me hizo feliz, pero ya es parte de mí la coraza que me ha costado destruir y aunque trato que esto desaparezca, en los momentos de caos sale a flote, ocultando de manera perfecta como estoy. Me encuentro vulnerable a todo tipo de sentimientos que se adueñan de mi cuando menos lo espero, volviendo nuevamente al inicio de este enredo, al tumulto de frases, oraciones y creaciones que dan vueltas en mi mente, obligándome a pensar más de la cuenta, visualizando pesadillas aunque el sol se encuentre en claridad, en fin, quiero borrar todo esto que me causa intranquilidad y alcanzar aquel instante de realidad.

¿Amistad?


En ofuscados recuerdos te encuentras tú, con tu lento hablar y una mirada temerosa, tímida, pero llena de calor y amor. Nos encontrábamos uno frente al otro, y entre el murmullo del resto sólo intercambiamos un par de palabras, las que avanzados los minutos y segundos no continuaron. Paso el tiempo, y lo que una vez habíamos dicho, no se volvió a repetir, y así cada uno continuo en mundos diferentes pero similares a la vez. Te borre de mi mente, pues no significaste nada para mí, sin embargo, nuevamente nos volvimos a encontrar y embarcados en un mismo viaje, hacia un mismo lugar, comenzamos nuestro viaje de amistad. Cada día que pasaba nuestras conversaciones se hacían más largas y profundas, y sin darnos cuenta te convertiste en una persona muy importante para mi. Sin vernos, mateníamos largas conversaciones por teléfono y del 100% de ellas, mas del 80% eran tonteras, las que provocaban grandes risotadas en cada uno de nosotros. Caminamos juntos largos trechos, sin aburrirnos ni cansarnos, pues cada uno ayudaba al otro a poder continuar. Compartí mi vida junto a ti, te entregue todo lo que en ella había, te di a conocer mis secretos, anhelos, ilusiones y deseos, en fin, muchas cosas que eran parte de mi, y ahora de ti, y lo mismo recibí yo, alimentando así cada vez más esta hermosa amistad. Con cada una de las miradas nos convertíamos en cómplices de lo que ocurría a nuestro alrededor. Sin la necesidad de hablar, ya sabías lo que me pasaba, y con sólo un abrazo me lo decías todo, haciéndome entender que cada día que pasaba, estarías junto a mi, como un amigo incondicional.

Tu cariño y comprensión se apoderaron de mí, y tu ausencia no la quería vivir, pero esto empezó a suceder, a paso lento comenzó la disociación, y cada día que pasaba la distancia nos separaba. Ocurrió, sin previo aviso dejaste de ser aquel amigo incondicional, porque según tú, en aquella lejanía, buscamos otro tipo de amistad. Fue tan simple para tí decir eso, sin importar como me sentía o que me ocurría, largabas frases y oraciones como si nada, y sin poder ver tu rostro, alguna expresión que explicara lo que estaba viviendo, continuabas con tus palabras.

Siempre he pensado que conversar por msn se hace complejo, porque no se sabe la intención con la que el otro esta diciendo las cosas y por otro lado, es la manera más fácil de hablar, porque no estas cara a cara, y esta ocación no fue la excepción. Con frases y oraciones cortadas y sin mirarnos a la cara, esta historia finalizaba.

Hoy, trato de analizar todo lo que vivimos y relacionarlas con tus palabras, simplemente no le encuentro sentido, no entiendo que sucedió o que tuvo que ocurrir para que esto se desvaneciera y llegara a su final. Hoy, ya no quiero pensar, sólo tratar de borrar cada uno de los recuerdos, porque se que no estarás.

Tu y yo


Inmovilizados y taciturnos los momentos que me encuentran junto a tí
Tras el tumulto de la gente que se agolpa en nuestro caminar
Mas nuestras miradas se detienen en un mismo observar, tu y yo
Es el punto fijo que nos logró atrapar
Y así recorrimos la noche, entre sonidos ensordecedores que acompañan nuestro andar,
Y en desaparecidas situaciones,
En donde un mismo lugar nos hizo avanzar tras un rumbo diferente que nos mueve,
Pero que no nos aleja de un volvernos a encontrar.
Nuevamente te vi, pero esta vez junto a mi,
Sintiendo por instantes tu olor cautivando asi mi interior,
Y con la voz entrecortada intercambiamos palabras
Las que temerosas se deslizaron mientras nuestras miradas se acoplaban
Y así avanzó el tiempo, hasta llegar al momento de la separación.

Tomados de la Mano


Hoy, cerre los ojos y estabas tú, frente a mí. Tomaste mi pequeña mano, y ante la calidez de tus dedos me entregue, sintiendo la más grande protección y comprendiendo que junto a tí nada me iba a suceder. Emprendimos un viaje a paso lento entre un hermoso sendero, con verdes prados repletos de rosas, margaritas, violetas, tulipanes, en fin, colores que armonizaban y daban forma a un arcoíris, haciendo grato nuestro andar. Sentíamos la brisa acariciando los rostros, y yo, sin temor a lo porvenir continuaba enlazada a ti. Recorrimos juntos y en libertad bajo el cielo azul, observando cada detalle que se construía frente a nuestros ojos y aunque a ratos nos encontrábamos silenciosos, comprendía que era lo que me decías. Tus palabras se deslizaban con sutileza al momento de hablar, instruyéndome en el camino del amor y la verdad, y yo, con la inocencia de una niña, escuchaba sigilosa cada uno de tus consejos, los que me ayudaban a poder transitar.

Entre días nublados y fríos, otros soleados y calurosos nos encontramos, viviendo y sintiendo lo que se presentaba ante nuestros pies, permaneciéndo inmóviles en oportunidades ante la majestuosidad del momento y en otras sólo esperando avanzar. Más ante lo sucedido, nuestro viaje no se paralizaba, y continuábamos. A ratos me preguntabas si necesitaba algo, pero el hecho de sentir sólo tu protección y calor ya lo era todo para mí.

Aunque aparecieron gigantes árboles en nuestro camino, me enseñaste, con dulzura en tus labios que no debía temer, porque aunque se presentaran inmensos ante nosotros, los podíamos superar confiando en que lo podíamos lograr. Al ver que podía soltaste de mi mano, porque dijiste que ya era hora de comenzar a caminar de manera autónoma. Con un poco de miedo empecé, sin embargo apareció el árbol que jamás habia visto en todo este recorrido, no sabía como superarlo porque sentía que era demasiado para mí... ya no podías estar junto a mí a cada instante para poder lograrlo y desfallecí, necesite como nunca cada uno de tus consejos y palabras sabias, pero no estabas, me sentí sola y desprotegida sin tenerte junto a mí, no podía caminar, y el sendero que al principio era hermoso se tornó oscuro y gris. Detuve mi andar y contemplando lo que se había creado frente a mí, aquello que me paralizó, escuche tu voz, y fue tu amor el que me ayudo a sobrevivir y superar lo más grande para mí.

Hoy nuevamente me tomo de tu mano, a cada instante, cuando siento que no puedo seguir, cuanto necesito de tu protección, cuando necesito tu calor, cuando necesito de tu amor, y entre tus brazos vuelvo a vivir. Hoy, después de este largo y cansador camino, me recosté junto a tí, y al ritmo de tu respiración me dormí ... Te quiero Papá.

Extraña Sensación


Llegue, y sin intercambiar miradas, en una silla un poco helada me senté. Escuchaba con atención cada palabra que se emitía, las que intercaladas daban forma a una oración, sin embargo al comenzar todo era extraño, porque mis labios se encontraban inmovilizados, mis cuerdas vocales dañadas y mi voz, mmmm bastante distinta, por lo que intentar provocar alguna melodía era complejo. Me dedique a mirar todo mi entorno y cada detalle que se formaba ante mis ojos, los distintos relieves presentes, el ropaje que cada uno traía consigo, los gestos que se articulaban según la situación, las sonrisas que se forjaban en los momentos de relajo, en fin, observando simplemente el respirar que nos hace avanzar. No sé si hice lo correcto el haber llegado a ese lugar en un día como hoy, puesto que estar ahí me era difícil en este estado, pero retractarme de la decisión, ya era demasiado tarde. Anhelaba con ansias el poder emitir melódicas notas, pero aunque lo hubiese intentado, ni siquiera la cuarta parte de mi registro se hubiese notado, y aunque en lo visible no se podía, si era posible realizarlo en lo invisible, en aquello que es oscuro ante la vista de los demás, en aquello en donde nadie más puede ingresar (sólo tú y yo), más en mi interior escuchaba cada nota emitida, logrando realizar los acordes que se pedían. Así continúe, tratando en lo posible de callar y sólo escuchar, aprendiendo y tomando nota de las cosas nuevas, como asi también de las pasadas pero ya olvidadas, aprendiendo de cada movimiento vocal, aún sin poder llevarlo a cabo en lo concreto. Y así pasaron las horas, entre repetidas canciones para lograr el acorde perfecto, mas esto llegó a su final, era hora de despedirse y decir "nos vemos en el próximo ensayo", pero lo que vendra será distinto, de eso estoy segura, porque mi voz volverá a la normalidad.
Que extraño se siente estar disfónica y no poder cantar, extraño sobre todo cuando tu vida es cantar.

Una cita sin concretar

Camine a paso presuroso, para así llegar a mi destino, esperando con ansias lo que se venía, preparando todo para ese momento, guardando todo lo que había que guardar, borrando todo lo que ya no servía, y mientras el reloj avazaba mis esperanzas se esfumaban, sin embargo esperaba paciente. Trate de hacer oídos sordos a lo que sentía, porque tal vez no era el momento y sólo debía esperar, pero a medida que pasaba el tiempo comprendía que no llegaría, y sin ningún aviso, sin saber que sucedía, especulaba, imaginando un sin fin de cosas que pudieron haber provocado el retraso, y ya no tan sólo eso, sino que el abandono de una cita que cambiaría en segundos un espacio de mí. Frente a todo esto me indigne, me sentí estafada con palabras delicadas que en el fondo me estaban mintiendo, pero con sutileza. Trate de canalizar toda la rabia que la situación me provocó y comencé a escuchar música, olvidando por instantes lo vivido, luego, al recordar, la rabia se había esfumado y ahora sólo pensaba en planear una nueva cita... ojalá que esta vez las cosas resulten, porque mi computador lo necesita mucho, de su arreglo, depende que pueda seguir en esto, jijijiji.